"A los guardias civiles no se les dota de una defensa reglamentaria como pasa con el resto de policías. Tienen una pistola y un arma larga de guerra, por lo que nos encontramos ante un hecho gravísimo: o responde a puñetazos o con su arma de fuego", aseguró Carrillo en declaraciones a Onda Cero.

El presidente de la AUGC volvió a pedir al director general de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, que asuma sus responsabilidades, porque "no ha contado la verdad desde un principio, lo que ha elevado el nivel de crispación provoncando un juicio paralelo gravísimo".

La asociación de guardias civiles exigió, una vez más, la necesidad de equiparar la Benemérita al resto de cuerpos policiales.

Carrillo aseguró que en la Guardia Civil "siguen actuando como un estado dentro del Estado. Debido a su excesiva disciplina y a la cadena de mando, quieren arreglar todo de puertas para adentro, perjudicando la armonización del cuerpo".