La vista oral, desarrollada en medio de un impresionante dispositivo de seguridad, también juzgaba a José Manuel Suárez Quintanilla, presunto compañero de fechorías de Garfia, así como a la novia de éste, María Begoña Alvarez.

Juan José Garfia protagonizó una espectacular fuga de un furgón celular de la Guardia Civil en Valladolid, y huyó hacia el sur del país.

En la provincia de Málaga cometió siete atracos y dos robos de coches, además del secuestro del tenientecoronel de la Guardia Civil, Antonio Rodríguez, al que, para robarle el coche, dejó maniatado y amordazado en unos montes cercanos a la ciudad.

La Fiscalía de Málaga solicita un total de setenta y cinco años de prisión para Garfia, que a lo largo de la primera etapa del juicio ha reconocido su participación en los siete atracos, en los que obtuvo un botín de diez millones de pesetas. No admitió en cambio haber sustraido los dos coches ni secuestrar al mando de la Guardia Civil.

Asimismo, Juan Jos Garfia ha exculpado a su presunto compañero de fechorías, José Manuel Suárez Quintanilla y a su novia Begoña Alvarez, de haber cometido con él los atracos, lo que contradice la declaración original.

Garfia mantuvo durante el proceso que inculpó en la primera declaración a Suárez Quintanilla y a Begoña Alvarez con el objetivo de encubrir a los auténticos responsables, junto a él, de los atracos.

Los informes realizados por peritos de la Guardia Civil confirman que Garfia secuestró al teniente cornel Garrido, cuando este se disponía a abandonar su vehículo en un parking de unos grandes almacenes.

Un total de veinte testigos prestarán declaración ante el Tribunal durante la vista oral, de los que varios han reconocido como culpable de los delitos que se le imputan a Juan José Garfia, quien en la actualidad y a sus 26 años cumple una condena superior a los cien años por asesinato.