El decreto prevé ayudas directas de 45.000 millones de pesetas, además de 100.000 millones de pesetas más de apoyo financiero para créditos a bajo coste para los agricultores. El porcentaje sería de un 3 o 4% a cinco años. La medida pretende que los agricultores puedan cobrar las ayudas procedentes de fondos como el Feoga a principios del último trimestre del año, en lugar e a finales.

"Vamos a hacer un esfuerzo importante para que se pueda pagar a principio del trimestre, lo que supone un adelanto de tres meses que sin duda va a mejorar la situación financiera, porque va a permitir que muchas explotaciones agrarias dispongan de esas ayudas a la hora de empezar a realizar los primeros pagos y compras para la preparación de la campaña siguiente", dijo. El ministerio pretende una mayor cooperación con las comunidades autónomas.

Respecto a la reforma del PER y el subsdio agrario, Atienza aseguró que los jornaleros que cobraron el subsidio agrario en 1992, después de haber justificado 60 peonadas, lo van a seguir percibiendo durante este año, aunque no hayan trabajado las 60 peonadas exigidas por culpa de la sequía.

Tras el encuentro con los medios de comunicación, Luis Atienza recibió a una delegación del sindicato de jornaleros del campo, liderados por Juan Manuel Sánchez Gordillo, número dos de IU por Sevilla, que desde hace varias semanas se están movilizando e la capital andaluza en reivindicación de la reforma de empleo rural y del sistema de acceso al subsidio agrario.