En declaraciones a Servimedia, Jáuregui aseguró que este crimen "hace mucho daño" a su partido, y añadió que los terroristas han segado la vida "a un político extraordinario, a un representante del socialismo asco como hemos tenido pocos".

Jáuregui comparó la trascendencia del asesinato de Buesa con la de los también militantes socialistas Enrique Casas o Fernando Múgica.

Añadió que ahora hay que establecer un "cordón de afecto" en torno a la familia del fallecido y de los militantes socialistas de Alava, provincia en la que Buesa era el presidente de su formación.