El artefacto explotó a las once menos cuarto de la mañana en el sótano de la residencia de la base militar, donde viven abitualmente oficiales y suboficiales, aunque según han informado fuentes del cuartel no se han registrado daños personales.

Minutos antes de la explosión, un comunicante anónimo alertó de la colocación del artefacto a la DYA, al periódico "Egunkaria" y a la emisora Egin Irratia.

La explosión tuvo lugar en un sótano en el que habitualmente se depositan las basuras, situado debajo del despacho de uno de los coroneles de la base, que no se encontraba en él en el momento de la deflagración. Aunque n se han producido daños personales, sí ha habido desperfectos materiales, con rotura de mobiliario y puertas.

Posteriormente, a las once y media de la mañana se realizó una explosión controlada, ya que aún quedaba material explosivo. Un trabajador de la residencia vio el artefacto antes de que estallara, una caja de cartón, aunque en ningún momento sospechó que pudiera tratarse de un artefacto explosivo.