Según testigos presenciales, después del atentado la policía logró detener a dos sospechosos a unos cincuenta metros del lugar de los hechos, que fueron conducidos en un coche celular a las dependencias policiales. Por el momento se desconoce la identidad de ambos detenidos.

En un primer momento los dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía quedaron herios, uno de ellos de muy grave, y fueron trasladados al Hospital de Basurto, donde Leiva Loro falleció y Durán Díez continua internado con heridas graves.

Los dos policías controlaban el acceso de público a las oficinas de expedición del DNI y del pasaporte cuando dos jóvenes se cercaron a ellos y les dispararon a bocajarro, huyendo posteriormente a pie.