"Cuando se habla tanto de generosidad, de diálogos, de reinserciones, no se debe olvidar nunca que lo primero que se tiene que hablar es que tenemos que termiar con la posibilidad de que sigan asesinando", agregó.

A juicio de Alvarez Cascos, "lo único que se mueve en ETA y su entorno es la voluntad del que tiene la pistola en la mano y mientras no se acaben las pistolas es inútil hablar de otras cosas, que sólo conducen a deteriorar los principios del Estado de Derecho".