En declaraciones a Radio Nacional, Verín aseguró que "cada vez que hay un líder fuerte, algo a lo que no se está acostumbrado en Asturias, surgen estos temores. Creo que el presidente del Principado es alguien con mucho liderazgo, con una gran capacidad de gestión pero muy del partido".

A juicio del destituido Verín, en Asturias se están viviendo momentos muy duro: "Parece que todo el mundo quiere hacer demostraciones de fuerza. Espero que mi dimisión sea simplemente una demostración de fuerza".

Agregó que las bases populares no han recibido una explicación sobre la crisis desencadenada en el seno del PP asturiano. "Después de tres años de un Gobierno que ha conseguido darle la vuelta a esta región, justo cuando las encuestas nos dan mayoría absoluta para las próximas elecciones, en ese momento comienzan unos ataques desde la dirección regional del partido al residente del Principado que han desencadenado en esta locura", señaló Verín.