Así lo precisó la asociación en un comunicado en el que avanzó que “mediará” con la organización y tramitará “posibles reclamaciones” por su anulación, al tiempo que pedirá la devolución de los importes pagados por las entradas, así como indemnización por “los posibles daños y perjuicios adicionales que esto haya podido causar” a los usuarios afectados por la cancelación.

“En base a esta anulación, los consumidores tienen derecho a recuperar el importe total de su entradas”, puntualizó la entidad, convencida de que la cancelación del festival “supone una modificación sustancial” en las condiciones del contrato, tal y como estipula la Ley 17/1997, de 4 de julio, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas.

“También habrá que analizar los posibles daños y perjuicios a reclamar por parte de los afectados”, abundó, para señalar que abrirá un canal de “consultas y reclamaciones” y criticar la “más que frecuente anulación de eventos de este tipo a pocos días de su celebración”.

Una circunstancia, que, según su punto de vista, “origina”, además, “una gran preocupación por parte de los consumidores por saber si van a recuperar el dinero invertido”.

La organización del evento emitió este jueves un comunicado en el que advirtió de que, “hasta la fecha”, no ha recibido “ninguna notificación formal” por parte del consistorio de la capital, por lo que, “en estos momentos, se mantiene la convocatoria de la celebración del festival”.