Este año, la campaña va destinada a informar a la sociedad de la importancia de prestar apoyo tanto al enfermo como a su familia, ya que el cáncer no es sólo un problema médico, sino también social.

"La enfermedad deja tanto en el enfermo como en su familia secuelas de carácter psicológico, a la vez que ocasiona muchos y graves problemas de tipo ecoómico", afirmaron las citadas fuentes.

La asociación recaudó el año pasado un 8,5 por ciento más que en 1997, lo que le permitió poner en funcionamiento 12 nuevas unidades móviles de cuidados paliativos.

Durante 1998, la asociación realizó 73.355 mamografías en sus unidades móviles, prestó apoyo psicológico a más de 18.500 personas y atendieron en las residencias-hogar de Madrid y Sevilla a más de 100 niños.