Ascó I, que produce 930.000 kilovatios/hora, permaneció parada entre los días 12 y 19 del presente mes, puesto que el pasado viernes se volvió a conectar a la red.

Los técnicos de la central nuclear pararon el grupo uno de Ascó al detectar una fuga de agua en los tubos de los geneadores de vapor. Para solucionar la avería, los responsables de la planta tuvieron que taponar dos nuevos tubos.

Aunque los responsables de la central niegan que existiera riesgo alguno para la salud humana o el medio ambiente, Greenpeace mantiene que es posible que se registrará un escape radiactivo al interior.

Según Angel Ayala los generadores de vapor de los dos grupos de Ascó, construidos por la multinacional Westinghouse, sufren un defecto de fabricación.

Por ello, los tres generadoresdel grupo uno serán sustituidos en 1995 y los tres del grupo dos un año después, probablemente durante el verano de 1996.

La Asociación Nuclear de Ascó estima que la sustitución de los seis generadores, que empezaron a funcionar entre 1984 y 1985, costarán 30.000 millones de pesetas.

La central de Ascó I es la que presenta un mayor número de tubos taponados, ya que un 10 por ciento de los mismos no están operativos.