Según ASAJA, el cultivo más dañado ha sido el viñedo, sobre todo en Castilla-La Mancha, con unas pérdidas de 17.000 millones en Toledo, 10.000 en Ciudad Real, 10.000 en Cuenca y 12.000 en Albacete.

También en Castilla y León se han ocasionado importantes daños sobre la cosecha de vid, aectada en un 60% en la "Ribera del Duero", un 55% en la de Cigales, un 60% de la Rueda y un 80% de la del Bierzo.

No obstante, la organización agraria considera que "se impone un compás de espera", ya que Ciudad Real ha sido la provincia menos dañada y representa el 25% de la producción nacional de viñedo, lo que permite mantener las esperanzas de recuperar la producción si se registran lluvias suficientes en los próximos dos meses.

En Rioja, especialmente en la Rioja Baja, los daños se estiman e un 40% de la cosecha, lo que equivale en términos económicos pérdidas de unos 8.000 millones de pesetas. En frutales, las pérdidas en esta zona es de unos 6.000 millones.

Por su parte, en Aragón, la pérdida por las heladas en frutales suponen en Zaragoza un quebranto de 28.000 millones de pesetas, y en Huesca de unos 7.000, mientras que los viñedos de Cariñena y Campo de Borja se ha perdido en un 80%.

La organización agraria coincide en que el bajo nivel de aseguramiento de las cosechas ha agravdo los efectos de las heladas, y achaca esta situación, a la "miopía política" del Ministerio de Agricultura, al recortar presupuesto y permitir que Agroseguro, el consorcio asegurador agrario, haya peritado de forma "sesgada y parcial" los daños de helada del ejercicio pasado.