"El papa Juan Pablo II y muchos organismos internacionales han denunciado envarias ocasiones las atrocidades de una guerra propiciada por los serbios", afirmó, "pero los gobiernos occidentales se empeñan en ponernos al mismo nivel que los agresores".

Juric, que acudió a la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense a pronunciar una conferencia sobre "La guerra de los Balcanes", desmintió que el enfrentamiento en Bosnia tenga carácter de guerra civil.

"Las masacres de Bosnia-Herzegovina y de Croacia son ataques de un Estado, Yugoslavia, al resto e las repúblicas. La guerra sólo la mantienen los que quieren recuperar una Yugoslavia que ya no existe", dijo.

Sobre la opinión que le merecen las denuncias del lado serbio sobre violaciones de los derechos humanos cometidas por croatas o bosnios, el prelado declaró a Servimedia que "no hay pueblos santos. Hay pecadores en todos, y en el mío también".

"Las reacciones en contra nuestra son comprensibles en ocasiones", afirmó, "pero creo que la opinión pública las hace sonar con grandes campanas, ientras oculta algunas peores de los serbios".

CONTRA VANCE Y OWEN

Juric invitó a todos los asistentes a la conferencia "a presenciar en directo lo que está ocurriendo en nuestras repúblicas. Todos los que puedan, que vengan y lo comprueben".

Durante el coloquio posterior, se refirió al plan de paz diseñado por Vance y Owen, que rechazó por no haber participado en él representantes de todas las repúblicas.

En opinión del arzobispo de Split, "el Gobierno serbio ha llevado a la guerra a su peblo de forma manipulada e inconsciente. Muchos ciudadanos serbios no son conscientes de los grandes crímenes que se organizan en su bando". Atribuyó la actitud serbia a que "la gran mayoría de ellos no han recibido el bautismo y no han sido educados en la fe".

Pese a todo, consideró que los refugiados bosnios deben pensar sólo en el perdón y no tener deseos de venganza. "Con odio no se acaba nunca nada, sólo con amor. La guerra, aunque sea impuesta, nunca compensa nada".

La conferencia pronunciaa por el arzobispo croata forma parte de los actos organizados por Cáritas Universitaria y Pastoral Universitaria para conseguir fondos que se destinarán a la campaña "Ayuda a 400 niños croatas", cuyo fin último es el apadrinamiento de niños afectados por la guerra en todas las repúblicas ex yugoslavas.