Según informaron a Servimedia fuentes próximas al ministro, Aranzadi tiene intención de convocar en los próximos díasa las centrales sindicales para explicarles los resultados del Consejo de la CE, y volver a solicitarles su apoyo para el plan elaborado por la CSI.

Los mismos portavoces indicaron que el Gobierno español no tiene intención de hacer variaciones en el plan que ha llevado a Bruselas, y reconocieron que aprovecharán el plazo fijado por los responsables de Industria de los "doce" para seguir con la campaña de sensibilización de los diez ministros que aún se oponen al plan español.

Respecto a la celebación de la próxima cumbre, Industria tiene el firme proposito de convocarla cuanto antes, una vez que el Gobierno holandés constituya la presidencia que sustiuirá a Gran Bretaña, y que los responsables del ministerio valoran como de "verdadero desastre para los intereses españoles".

También rechazaron las informaciones de la reunión de Bruselas que califican los resultados del encuentro como "revolcón" de las pretensiones españolas, ya que no se trata de una prohición al plan español, sino de un aplaamiento de la decisión.

No obstante, Industria entiende que la situación sigue siendo dificil para el plan de la CSI, que sólo cuenta con el apoyo de Italia frente al rechazo del resto de los países miembros. Esta actitud ha generado cierto disgusto en la delgación española por la impresión generalizada de que se pretende discrimar a España, respecto a las ayudas que se otorgaron a Italia hace dos años.

La protesta española se hizo patente, incluso, en el transcurso del Consejo de Ministros, en e que Claudio Aranzadi hizo llegar a su homólogo alemán su "profundo desagrado" por el rechazo germano, después del apoyo prestado hace unos años por España al plan de reconversión de los astilleros alemanes.