En rueda de prensa conjunta con el presidente del Gobierno español, José María Aznar, Arafat ha explicado que esa presencia de más observadores ayudaria a evitar episodios como la quema de 3.000 olivos centenaris en el campo de refugiados de Ramala, base de la economía de muchas familias de la zona.

El líder palestino se ha comprometido a hacer "todo lo que esté en nuestra parte" para que acaben los atentados suicidas de militantes de Hamas y Hezbollah. "No vamos a tolerar que ninguna persona vaya en contra" de los acuerdos de paz que firme la ANP con Israel.

Aznar, por su parte, ha saludado estas palabras de Arafat, y ha cortado tajantemente cualquier especulación sobre su papel mediador en la zona. "N estoy en ninguna función mediadora" entre Aarafat y el presidente de los EEUU, George W. Bush, señaló el jefe del Ejecutivo.

Sin embargo, el presidente ha reconocido que ayer habló por teléfono con Bush y que esa charla se produjo en la "línea de entendimiento sumamente positiva" que ya se evidenció durante la reciente visita a España del mandatario estadounidense.

José María Aznar ha pedido a arabes e israelíes "máxima comprensión, máxima determinación y máxima determinación" para acabar con laviolencia.

Ha instado a Arafat a "rechazar cualquier tipo de provocación" y a que ambas partes prosigan el proceso de paz sobre la base del `Informe Mitchell`. Además ha advertido a Israel que "cualquier decisión sobre asentamientos quede totalmente paralizada, bloqueada" hasta que se alcance una solución.

El presidente del Gobierno admite que la situación de los territorios palestinos, bloqueados por tropas israelíes, es "realmente insoportable", con las cuentas bancarias bloquedasa y sin poder bandonar esos territorios ni para trabajar.