Poco después de la media noche del pasado día 4, la mujer fue asaltada cuando iba a su domicilio, situado en la calle General Fanjul. El desconocido, que esgrimía un cuchillo, le exigió el dinero que llevaba.

Una vez que consiguió las 1.700 pesetas que tenía, la condujo hasta una zona solitaria, donde la violó, según informó hoy la Jefatura Superior de Policía.

La mujer presentó una denuncia el día siguiente y facilitó la escripción de su agresor: un vecino del barrio, que tenía antecedentes policiales. Los funcionarios comprobaron que cumplía condena en la prisión toledana de Ocaña, pero que disfrutaba de permisos de salida. En la fecha de la violación, Rafael Maroto estaba en libertad.

Maroto fue detenido el pasado fin de semana en una sala de juegos recreativos y fue reconocido por la mujer. El presunto violador no quiso declarar en comisaría.