Así lo dijo hoy el director general de AOP, Álvaro Mazarrasa, en un encuentro organizado por el congreso Biofuel Summit&Expo.

En su intervención, Mazarrasa explicó que "se prevé que la demanda de gasóleo va a aumentar en Europa y en Estados Unidos", a la vez que se va a reducir la de gasolina. Esto dará lugar a un excedente de gasolina que hará que baje la tensión sobre su precio.

El excedente será aún mayor en Europa, porque disminuirá su exportación a Estados Unidos. Allí cada vez se consume más diésel y cada vez se produce más bioetanol a partir del maíz (el biocombustible que se mezcla con la gasolina).

Mazarrasa expresó su deseo de que, en la normativa que el Ministerio de Industria prevé promulgar en las próximas semanas acerca de los biocombustibles, se otorgue "total flexibilidad" a la industria a la hora de cumplir con los objetivos marcados (alcanzar un 3,5% de biocombustible en 2009 y un 5,83% en 2010).

Un deseo difícilmente alcanzable cuando desde la Comisión Nacional de la Energía se defiende una "flexibilidad intermedia", según dijo hoy su director de Petróleo, Pedro Miras.

CALIDAD DE LOS BIOCOMBUSTIBLES

Mazarrasa subrayó también que es necesario que los biocombustibles tengan "al menos las mismas condiciones de calidad que los carburantes actuales".

En este sentido, recordó que recientemente se ha descubierto que "no todos los biocarburantes reducen las emisiones de CO2 en igual proporción", por lo que habrá algunos que no cumplirán con los requisitos marcados por la Unión Europea (rebajar un 20% las emisiones de CO2 en 2020).

"Va a haber mucha materia prima que quede fuera de juego", señaló Mazarrasa.

Añadió que las soluciones que se aplican en otros países, como Estados Unidos o Brasil (grandes productores de cereal y de caña de azúcar, respectivamente), no son aplicables a España porque "somos un país de secano". En España se parte de la dificultad de no contar con suficiente materia prima para la elaboración de biocarburantes

A pesar de todo, Mazarrasa defendió la necesidad de diversificar las fuentes de energía mediante la utilización de biocarburantes, por motivos medioambientales y también económicos, ya que permitirán a España reducir su dependencia energética.

A este respecto, apostó por aumentar la producción de biodiésel frente a la de bioetanol (es decir, por incorporar biocombustibles a la mezcla de gasóleo, no a la de gasolina).