Julio Anguita hizo estas declaraciones en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en la capital del Principado, donde participó en la celebración del Consejo Político de Izquierda Unida de Asturias.

Anuita aseguró que los tratados de Maastricht incumplen algunos artículos de la Constitución española referidos a aspectos como la productividad, la creación de empresas, la fiscalidad y el empleo, y afirmó que "Maastricht es un gigantesco receptáculo de ignorancia porque no se han leído los tratados y hoy se están viendo las consecuencias de una política de barbarie".

El líder de Izquierda Unida recordó que la coalición ha enviado cartas a los partidos políticos de izquierda y a los sindicatos en las qe les invita a dar una respuesta contundente y urgente a la actual situación económica, social y política del país, que pasa por "el paro, que se sigue manteniendo, por la política salvaje de privatizaciones, siguiendo por una contrarreforma fiscal con el trasfondo de la construcción europea según el modelo Maastricht".

Anguita negó que con esta llamada Izquierda Unida esté intentando el acercamiento al PSOE. "El que crea que esto está pensado para recuperar relaciones, se está equivocando garrafalmene", dijo.

Añadió que "el planteamiento es qué hacemos con España; o nos aguantamos o nos unimos en torno a un programa de izquierdas que habría que discutir pensando siempre en los trabajadores. Otras interpretaciones son propias de contenidos frívolos".

Anguita dijo que no quería entrar a valorar si el PSOE está realizando oposición, aunque recordó que hasta el momento el 85% de las iniciativas presentadas en el Congreso han sido de Izquierda Unida.

Tampoco quiso pronunciarse sobre la polémca de las facturas del Ayuntamiento de Oviedo y el respaldo de Alvarez Cascos a la gestión del alcalde de esta ciudad. Sólo afirmó que "los que han votado a la derecha aprenderán con estas cosas".

Anguita visitó ayer por la tarde a los tres trabajadores de la empresa Cristalería Española que permanecen encerrados en huelga de hambre desde hace 25 días en una iglesia de Avilés.