Ardanza dijo en San Sebastián que "en democracia no hay tabúes y se puede plantear cualquier asunto siempre dentro de unas reglas de juego determinadas, sin violencias, sin pistolas y sin chantajes; no hay que escandalizarse".

El lehendakarimostró su sorpresa por la polémica desatada por el líder de IU, que abogó en favor del federalismo y del derecho de autodeterminación, además de hacer profesión de fe republicana, y apuntó que "da la sensación de que no hay solidez democrática en este país".

Por su parte, Pilar Rahola declaró a la Cadena SER que está contenta "de que se amplíe el club de los republicanos" y consideró que la monarquía, la Casa Real, en tanto que institución que está en el juego político, también tiene que ser criticabl".

Rahola recordó que cuando ella llamó "ciudadano" al monarca "también hubo un cierto nerviosismo por parte de algunos sectores, pero la verdad es que no pasó nada".

"Creo que hay un tabú respecto al rey, creo que si no hubiera tabúes, Anguita no habría creado tanta polémica a su alrededor", apuntó Rahola, quien estimó positivo "que haya unas ciertas catarsis para que lentamente la libertad de expresión, también en el terreno de la Casa Real, se vaya amplificando".