Gerardo F. resultó contaminado el pasado 24 de noviembre de 1995 al manipular un contenedor en cuyo interior había una pequeña fuente de Estroncio 90. Suempresa participaba en la campaña de retirada de pararrayos que inició Enresa en 1993.

Según informó hoy Empresa Nacional de Residuos Radiactivos, el informe médico afirma que la contaminación fue muy inferior a la incialmente estimada y podrá dedicarse inmediatamente a cualquier actividad dentro de su empresa, incluida tareas idénticas a las que venía realizando.

De acuerdo con el análisis efectuado al trabajador en la unidad de Dosimetría del Centro de Investigaciones Energéticas, TecnológicasMedioambianetales (Ciemat), la contaminación producida es inferior al 40 por ciento del valor previsto en la reglamentación española e internacional para estos casos.