(Ampliación)LA UE SITÚA A ESPAÑA ENTRE LOS PAÍSES CON UN MAYOR IMPACTO DEL ENVEJECIMIENTO EN EL GASTO PÚBLICO HASTA 2060
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, advirtió hoy de que España se sitúa entre los países de la UE en los que más se incrementará el impacto en el gasto público del envejecimiento hasta 2060 si no se adoptan medidas.
En una comparecencia en la Comisión de Seguimiento del Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados, Almunia señaló que en España, junto a otros ocho países europeos, como Irlanda, se prevé un incremento del gasto vinculado al envejecimiento superior al 7%, frente a una media del 4,7% en la UE y del 5,5% en la zona euro.
A continuación, el grueso de países europeos, entre los que aparecen Reino Unido o Alemania, presentan previsiones de crecimiento del gasto entre el 4 y el 7%, mientras que países como los escandinavos, Francia e Italia tienen previsiones por debajo del 4%.
A este respecto, recordó que las proyecciones de población de la UE en 2060 indican que la Unión contará con 506 millones de habitantes, de los que el 30% tendrán más de 65 años y el 12,1% más de 80.
Esto llevará a que la tasa de dependencia, el número de personas que mantienen a cada mayor de 65 años, aumente del 25% en 2008 al 53% en 2060. Esto supone que se pasará de cuatro personas por cada mayor a dos personas.
Ante esta situación, afirmó que "en todos los países la reforma del sistema de pensiones es un debate actual que no se acaba de un día para otro".
Por ello, entre las medidas a aplicar, Almunia habló de alargar la edad de jubilación o de variar los criterios del sistema de jubilación anticipada.
ESTRATEGIA EUROPEA
Se refirió también a los cinco objetivos generales de la estrategia europea para hacer frente al envejecimiento a medio y largo plazo.
Estos son promover la renovación demográfica en Europa (con ayudas a las familias), generar niveles de empleo con mayores periodos de vida laboral, conseguir una economía europea con mayor productividad y dinamismo, establecer a escala europea una estrategia de recepción e integración de los inmigrantes y asegurar la sostenibilidad de las cuentas públicas para garantizar los niveles de protección social.
Además, advirtió de que no se pueden dejar de hacer reformas confiando en los flujos migratorios, porque "no sabemos si los flujos serán los que fueron o serán distintos a los del ciclo expansivo anterior, pero no pueden ser una excusa para no tomar medidas contra el envejecimiento porque sólo posponen la necesidad y no eliminan el desafío".
Por otro lado, apuntó que "todavía es pronto para advertir el impacto de la crisis y saber si tendrá un efecto estructural o sólo temporal", aunque señaló que "tiene un impacto evidente en el corto plazo, al generar un endeudamiento que restringe el margen de maniobras de los sistemas públicos durante los primeros años de la recuperación".
Concluyó que "se trata de un desafío peculiar europeo que se debe resolver con una visión a medio y largo plazo y no con reacciones inmediatas a situaciones coyunturales.
"Las reformas se deben traducir en estrategias políticas de medio plazo, por lo que se deben consensuar al máximo posible con una proyección temporal más allá de una legislatura, ya que requieren estabilidad, con independencia de que cambien las prioridades políticas de quienes tienen mayoría parlamentaria", apostilló.
Sin embargo, advirtió de que "el compromiso de perseguir el consenso para tomar decisiones es un gran activo que no puede ser esgrimido por nadie como un activo que impida las reformas".
(SERVIMEDIA)
28 Abr 2009
CAA