Fuentes gubernamentales indicaron que se están produciendo encuentros en ámbitos comunitarios, en los que la Presidencia sueca de la UE está procurando la inclusión de dicha declaración en la reunión de presidentes, primeros ministros y comisarios europeos e Goteborg. La última de estas reuniones tendrá lugar el próximo lunes y hasta que se cierre ese proceso negociador el Ejecutivo de José María Aznar no adoptará una posición al respecto.

Si finalmente no se incluye la declaración sobre la convergencia estadística en la "cumbre" de Goteborg, España no adoptará ninguna medida de presión, ya que este asunto no estaba programado como materia de discusión del Consejo Europeo con el que se cierra la Presidencia sueca.

Las mismas fuentes explicaron que a intención de poner encima de la mesa la convergencia estadística tras la ampliación no era para que se tratara en el Consejo de Goteborg, sino para que la "maquinaria europea" se ponga en marcha y en el plazo de dos o tres meses la Comisión Europea tenga un papel sobre el asunto, a partir del cual, y con tiempo suficiente, se produzca un debate que ha de comenzar a partir del 1 de enero de 2002, según el programa establecido por la propia UE.