En una carta dirigida a los ministros de Exteriores de la UE, AI expresa su preocupación ante las declaraciones de la Presidencia checa de la UE de no actuar frene a las denuncias de violaciones del derecho internacional, ni de exigir responsabilidades por ellas.

La organización humanitaria asegura que cuenta con pruebas "irrefutables" de crímenes de guerra y otras violaciones de los derechos humanos, como el uso de bombas de fósforo blanco en zonas con alta densidad de población civil.

También cuenta con pruebas de ataques directos, desproporcionados e indiscriminados contra la población civil, así como de abusos graves contra el derecho internacional de los derechos humanos.

"La idea expresada por la actual Presidencia, según la cual tales violaciones son algo 'normal' en los conflictos, es irresponsable", asegura Nicolas Beger, director de la Oficina de AI ante la UE.