Reza Hejazi fue ahorcado ayer a las once de la mañana en la prisión central de Isfahán tras haber sido condenado por un asesinato que se cometió cuando él tenía unos 15 años.

AI pide al poder judicial iraní que detenga todas las ejecuciones de personas que fueran menores en el momento de cometerse el delito, y pide al Gobierno de Irán que las prohiba, conforme establece el Derecho Internacional.

La sentencia condenatoria fue dictada por la Sección 28 del Tribunal Supremo de Meshed el 6 de junio de 2006, pese a que, según la ley iraní, Reza Hejazi debería haber sido juzgado por un tribunal de menores.

AI recordó hoy que, en estos momentos, otros dos muchachos condenados por crímenes cometidos cuando eran menores de edad "corren grave peligro de ser ejecutados de forma inminente en Irán, al igual que Reza Hejazi".

Se trata de Behnoud Shojaee, de 20 años, y Mohammad Feda'i, de 21 años, quienes fueron condenados a muerte después de juicios sin las debidas garantías procesales y por delitos que cometieron cuando tenían menos de 18 años.

AI tiene activa una ciberacción desde el 5 de agosto para instar a las autoridades iraníes a que anulen las ejecuciones de Behnoud y Mohammad, supriman la pena de muerte aplicable a todos los delitos cometidos por menores y conmuten las condenas de los que se encuentran en espera de ejecución.

133.000 FIRMAS

Hasta el momento se han recogido más de 133.000 firmas de apoyo, que han servido para que tanto a Behnoud como a Mohammad les hayan concedido un aplazamiento de dos y cuatro semanas respectivamente, para negociar con las familias de las víctimas el pago de la diyat (indemnización).

"Sin embargo, ambos siguen corriendo grave peligro de ejecución inminente", dijo hoy AI, para la que "la presión internacional puede ser determinante a la hora de frenar la ejecución de Behnoud y Mohammad y el resto de menores que se encuentran condenados a muerte en Irán".