Alvarez del Manzano destacó que con esta decisión el Ayuntamiento quiere hacer patente su deseo de normalizar la empresa, a pesar de que ésta atraviesa graves problemas de tesorería a causa de la huelga.

Sin embargo, puso de relieve que el pago de la extra de marzo, cuya cuantía guardará relación a los días trabajados, "no hay que mezclarlo con la huelga", ni significa cambio alguno de planteamiento por parte de la corporación en relación con el conflicto.

Precisamamente,varios centenares de empleados de la EMT, acompañados de sus esposas, se manifestaron ayer frente a la sede de la empresa, en la calle Alcántara, para exigir a la dirección el abono de la paga extra, que está recogida en el convenio y asciende a 107.000 pesetas. El gerente, Tomás Burgaleta, se comprometió a hacerla efectiva hacia el 15 del presente mes.

Por otro lado, el alcalde quiso dejar claro que los integrantes de la comisión encabezada por el ex defensor del Pueblo, Joaquín Ruiz-Gimenez, a quiens recibió esta semana en su despacho para hablar de la huelga de autobuses, no se reunieron previamente con miembros de la Plataforma Sindical, como éstos han manifestado.

Reiteró que su equipo de gobierno está a la espera de conocer la decisión de los tribunales sobre los 27 despidos y que no está interesado en hablar de cuestiones como la privatización de la empresa, sino que su único objetivo es acabar con la huelga, que hoy cumple dos meses.

El regidor reconoció que es consciente de la situacón tan difícil que están viviendo muchos de los trabajadores, que quieren acudir a sus puestos aunque se lo impiden grupos violentos, y que, a diferencia de otros de sus compañeros que operan en el sector del taxi, carecen de ingresos alternativos.