LOS ALTOS CARGOS DE LA ADMINISTRACION MEDIOAMBIENTAL ACOGEN CON OPTIMISMO EL CAMBIO DE NOMBRE DEL MINISTERIO DE OBRAS PUBLICAS

MADRID
SERVIMEDIA

Los altos cargos de la administración medioambiental han acogido con optimismo el cambio de nombre del anterior Ministeio de Obras Públicas y Transportes, que en la actual legislatura se denominará Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente. Por el contrario, las organizaciones ecologistas observan el cambio con escepticismo.

Los directores generales vinculados a la Secretaría de Estado para las Políticas del Agua y el Medio Ambiente consideran que la variación confirma que las políticas conservacionistas adquieren cada vez mayor relevancia.

Así lo cree Domingo Jiménez Beltrán, director general dePolítica Ambiental, para quien el cambio de nombre "es una señal importante".

"Es un paso importante", explicó a Servimedia, "y una señal de que el medio ambiente es prioritario, por lo que en la administración se trabajará con mayor intensidad en este campo".

Para el director general de Política Ambiental, "es necesario aumentar la capacidad y la eficacia, convertirnos en otro sector que responda también a las expectativas de los ciudadanos, ya que algunos empiezan a desilusionarse".

Por suparte, las organizaciones ecologistas han acogido con menos entusiasmo y más escepticismo el cambio de nombre de un ministerio al que acusan de "destruir el medio ambiente".

Santiago Martín Barajas, de la Coordinadora de Organizaciones para la Defensa Ambiental (Coda), considera que el titular de este ministerio, José Borrell, carece de la sensibilidad ambiental adecuada.

Para el representante de la Coda, la política de construcción de embalses que, a su juicio, intenta promover el Plan Hidrológio Nacional, "es parecida a la que desarrollaba Franco en los años sesenta".

(SERVIMEDIA)
18 Jul 1993
GJA