"Hace tan solo quince días nadie se hubiera atrevido a pronosticar un resultado de campaña como el que se va a producir. Ni los cálculos más pesimistas podían augurar, para este año, un resultadoinferior al alcanzado en la campaña pasada, sin embargo, mucho nos tememos que la cifra final no supere los 16 millones de toneladas de cereales", asegura la patronal en un comunicado.

Las altas temperaturas afectan principalmente al trigo y la cebada de las zonas de Castilla y León y Aragón, principales focos productores.

Computando el maíz, la cosecha total podría alcanzar los 20 millones de toneladas, una "cifra mediocre", cuando hace tan solo unos días algunas voces pronosticaban una gran camaña.