Este dato contrasta con las denuncias presentadas hace unos meses contra varias gasolineras de la Comunidad de Madrid precisamente por todo lo contrario: suministrar menos gasolina que la que se indicaba en el contador.

En el estudio realizado en Galicia se pudo comprobar que la gasolinera que menos combustible estaba proporcionando lo hacía por encima del litro (1.010 mililitros), mientras que las más espléndidas proporcionaban 1.040 miilitros.

Este exceso en el suministro no le cuesta nada al cliente, según se refleja en el estudio, ya que las gasolineras, independientemente de su bandera, suministraban el gasóleo al mismo precio.