A su juicio, el Papa polaco "deja a la Iglesia Católica totalmente dividida". Por debajo, "la Iglesia de los pobres" y, por arriba, una curia "fundamentalmente con influencia del Opus Dei". "Una Iglesia jerarquizada y absolutamente reaccionaria", sentenció.

Alcaraz comentó que "el problema" que existe es que "un montón" de los 117 cardenales que van a tener que elegir sucesor en el Cónclave Vaticano "son de su cuerda, de la misma tendencia integrista".

"Lo lógico sería que se hiciera un guiño a toda Iberoamérica", dijo el dirigente comunista en alusión a la posible elección de un Papa de habla hispana.

"Teniendo en cuenta además la necesidad de soldar esa enorme fractura entre la Iglesia de los pobres, de la (Teología) de la Liberación, y la Iglesia integrista, sería bueno que hubiera un papa Hispanoamericano", concluyó.