La primera Convención Municipal Socialista, celebrada en Santiago de Compostela bajo el epígrafe "Los nuevos horizontes de la autonomía local", se saldó con el compromiso de defender una financiación municipal "estable y suficiente".

A pesar del balance positivo que hacen de la Ley reguladora de las Haciendas Locales, de 1988, los socialistas consideran que ha llegado el momento de acomete reformas para garantizar la estabilidad y la suficiencia financiera de las corporaciones locales en el actual escenario económico global.

Esa reforma, apuntan, debe articularse en el marco de un Pacto Global de Financiación de las Administraciones Públicas, es decir, la central, las autonómicas y las locales. En consecuencia, el sistema de financiación de las corporaciones locales debe coincidir en el tiempo con el de las comunidades autónomas, y se debe garantizar la presencia de los ayuntamientos e el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

Los socialistas precisan que esta reforma no debe gravitar sobre los ciudadanos en forma de un aumento de los impuestos, sino que debe "racionalizar" los ingresos y gastos de los ayuntamientos, y adecuarlos a las competencias que desarrollan y a los servicios que prestan.

DEMAGOGIA CON EL IAE

En este punto, los socialistas denuncian "el exceso demagógico en relación con el IAE, que ha usado esta medida con carácter electoralista desde 1995 sin que hata la fecha haya presentado una propuesta articulada". Por ello, le exigen que difunda su propuesta definitiva antes del final de este año.

Los ediles socialistas se niegan a perder su capacidad tributaria sobre la actividad económica y piden por ello una garantía de que los ayuntamientos serán adecuadamente compensados por los recursos que puedan dejar de percibir.

Además, piden que un hipotético nuevo modelo garantice la continuidad de la función censal de la actividad económica que a nivel locl realiza el IAE, y que mantenga la tributación sobre la actividad económica generada en el municipio como una fuente básica de la hacienda local.

"Lo razonable", apuntan, "sería que cualquier reforma del IAE partiera de considerarlo un impuesto a cuenta de la renta o los beneficios, es decir, que se establezca una deducción por el cien por cien de su cuota en el IRPF y en el Impuesto de Sociedades".

Asimismo, los alcaldes del PSOE reclaman una revisión "en profundidad" de la participación en losingresos del Estado y un aumento notable de la cuantía del fondo inicial de modo que se minimice el riesgo financiero para las localidades que se pudieran ver afectadas por la transición.

Solo con estas garantías, advierten, las corporaciones locales podrán ofrecer a sus ciudadanos una mejor calidad de vida con políticas de urbanismo, medio ambiente, igualdad, o empleo.