En una entrevista en Servimedia, Escobar dijo que “respeta” las decisiones que tome cada consistorio, pero subrayó que Logroño no sufre la presión turística que sí tienen Barcelona o Madrid. Sin embargo, sí abogó por tomar medidas para preservar el “modelo de vida” logroñés. “Si dejamos que eso se devalúe tenemos un problema”, reconoció.

Esta misma semana, el Ayuntamiento de Logroño confirmó que estudiará la adopción de medidas restrictivas ante la proliferación de apartamentos y pisos turísticos. No obstante, el Gobierno municipal esperará a conocer un informe en el que trabaja la Universidad de La Rioja.

Sea como sea, Escobar dijo que tiene “claro” cuál es “el modelo de ciudad” por el que quiere “apostar”, y garantizó que le parece “absolutamente capital” que haya un “modelo de convivencia” el que “el protagonismo lo tenga un espacio para vivir”. “Pero eso tiene que ir en sintonía con espacios para poder disfrutar, para poder invertir y para poder trabajar”.

“Tiene que haber una oferta turística diversa y variada para permitir acoger al turismo, al visitante. Pero, de manera protagonista, hay que dar un espacio en las mejores condiciones de habitabilidad para el vecino. De no hacer eso, probablemente los barrios, sobre todo los históricos, se ven desgarrados de su propia identidad y eso me parece que no podemos permitirlo. Creo que estamos haciendo razonablemente bien las cosas, dialogando con todo el mundo, para buscar ese equilibrio en la ciudad”, defendió el alcalde de Logroño.

En esta línea, señaló que buscará un modelo turístico que respete “el modelo de vida” logroñés, que “va muy unido” al vino, la tapa y “disfrutar de la calle”. “Lo fundamental es esa dosis de equilibrio a partir del protagonismo indiscutible del vecino”, zanjó.

Por otro lado, Escobar remarcó que el Ayuntamiento ha desarrollado un plan para facilitar la emancipación de los jóvenes de la capital riojana, que sacará al mercado un total de 440 viviendas asequibles.