EL ALCALDE DE HOSPITALET DICE QUE NO DIMITIRA POR LAS ACUSACIONES DE ADJUDICAR OBRAS IRREGULARMENTE Y QUE SU CASO NO ES UN MOHEDANO-2'
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El alcalde socialista de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Juan Ignacio Pujana, aseguró esta tarde que no dimitirá de su cargo a pesar de las acusaciones de haber adjudicado presuntamente de forma irregular las obras de un aparcamiento a una constructora y de impedir la actividad de funerarias para favorecer a una empresa que le vendió un piso a bajo precio. Pujana negó que su caso pueda calificarse de 'Mohedano-2'.
El alcalde de L'Hospitalet reresó hoy mismo de Estados Unidos, donde se encontraba de vacaciones, tras ser llamado por el Partit dels Socialistes (PSC) el lunes a declarar con carácter de urgencia para explicar su implicación en la presunta adjudicación irregular del parking de la plaza Guernica a la constructora Blas Zaplana, por la que se sigue una investigación judicial.
En su comparecencia de esta tarde en rueda de prensa, Pujana desmintió todas las acusaciones y dijo tener la conciencia muy tranquila porque su acutación habí sido correcta y de muy buena fe.
Según explicó, en sus actuaciones no ha existido ninguna irresponsabilidad política ni ningún trato de favor por su parte a determinadas empresas. Pujana aparece como uno de los imputados en la querella por un posible pago de comisiones en la citada investigación judicial.
Pujana mantendrá mañana una reunión con una comisión de cuatro o cinco miembros de la junta nacional del PSC, entre ellos el primer secretario, Raimon Obiols, con el fin de que explique su presnta implicación en las cuestiones de que se le acusa.
El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de L'Hospitalet, Jordi Seguí, cuenta en su poder con la declaración de bienes de 1991 del alcalde de esta ciudad en la que, al parecer, se encuentra incluido un automóvil Peugeot 309 perteneciente a VICSA, una de las empresas implicadas en la presunta concesión irregular de las obras al aparcamiento, y que Juan Ignacio Pujana utilizó a lo largo de cuatro años.
Por otra parte, según una informacióndel diario 'Avui', el alcalde impidió, a través de un decreto, cualquier tipo de actividades relacionadas con los servicios funerarios desarrollada por empresas ajenas a Funerarias L'Hospitalet SA. Este mandato se saltó la regulación de la adjudicación del servicio municipal de pompas fúnebres, según la cual no se podía gestionar en régimen de monopolio.
Según este diario, el propietario de Funerarias L'Hospitalet vendió a Pujana en 1990 un piso al 50 por ciento de su precio real de mercado, por el qu el alcalde pagó cinco millones.
(SERVIMEDIA)
28 Jul 1993
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