Defensa

Alakran, Cobra y Amos son las opciones para modernizar los morteros del Ejército

MADRID
SERVIMEDIA INFODEFENSA

La Dirección General de Armamento y Material (DGAM) trabaja para dotar al Ejército de Tierra con morteros de 120 mm embarcados en vehículos tanto de ruedas como de cadenas y baraja las opciones de los morteros ‘Alakran’ de la española NTGS, ‘Cobra’ de Ruag y ‘Amos’ de Patria-Hägglunds.

Así lo recoge un artículo sobre el presente y futuro de los morteros del Ejército de Tierra publicado en el último número de ‘Memorial de Caballería’. La idea es adquirir sistemas con una gran movilidad y rapidez, alcances de hasta 15 km, puntería automática que evite el uso de jalones y reduzca el error humano, simuladores para no depender de la disponibilidad de munición y campos de tiro y con capacidad para integrarse en las estructuras de mando y control.

La primera opción, el Alakran, ya ha sido evaluada por la Legión. Se trata de un sistema con un tubo de 120 mm que puede instalarse en vehículos de 1,5 toneladas de carga útil, gracias a su sistema de transferencia de retroceso al suelo. El mortero se despliega en pocos segundos y apunta de forma automática. Cuenta con un navegador inercial que le permite conocer en todo momento la posición del vehículo, incluso cuando se pierda la señal satélite, y calcular los datos de tiro.

El mortero Cobra es otra de las opciones que estudia el Ejército de Tierra. En este caso, la idea sería adquirir una configuración similar al Piranha con mortero Cobra, seleccionado por Suiza. No hay nada definido por el momento, pero se exploran dos vías: la integración de este mortero en los vehículos de la segunda fase del programa VCR 8x8 o la modernización de alrededor de 200 BMR o TOA con este sistema.

MAYOR SEGURIDAD

El Cobra emplea un sistema de carga semiautomático que, aunque vuelve más complejo al mortero, brinda mayor seguridad a la tripulación, que no se expone en el momento de cargar, mientras que su trabajo es bastante más simple y consiste en quitar la anilla de seguridad y la carga de proyección sobrante, y cargar el alimentador del tubo.

La tercera vía es comprar un mortero de 120 mm sobre torre blindada como el Amos de doble cañón o el Nemo de solo un tubo. Entre sus características destacan el posicionamiento tanto inercial como por GPS, protección contra fusilería y ambiente NBQ, permite disparar en 360 grados, retrocarga automática, entre otras. Esta solución permite el tiro tenso de hasta 1.500 metros, y lleva la función MRSI de impacto simultáneo de múltiples disparos, para batir el objetivo con hasta 16 proyectiles a la vez.

En España, Escribano trabaja en un mortero de estas características. La compañía presentó este desarrollo sobre un vehículo de cadenas Ascod en la feria Feindef, celebrada el pasado mes de mayo en Madrid. La solución está pensada para el futuro Vehículo de Apoyo de Cadenas (VAC).

(SERVIMEDIA)
04 Sep 2023
JSR/gja