Durante su participación en un coloquio organizado por el Foro Nueva Economía, Aguirre trató de explicar las repercusiones políticas que, en su opinión, tendría un accidente similar al del Carmen en Madrid.

"Yo estaría en este momento en libertad condicional bajo fianza, suponiendo que todos mis amigos y yo hubiésemos podido pagar esa fianza y, además, tendría por lo menos 100 ó 200 personas del PSOE impidiéndome la salida de mi casa, llamándome especuladora, sinvergüenza, asesina, golfa, en fin, de todo", apostilló.

Aguirre criticó que el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, proponga reducir la crispación política en Cataluña que ha generado la tragedia del Carmel a base de de "vaselina".

La presidenta de la Comunidad calificó de "indignante" la actitud de Maragall, al que recomendó que ponga sobre la mesa todas las pruebas que tenga sobre el supuesto cobro de comisiones del tres por ciento en la Generalitat por la asignación de obras por los anteriores gobiernos de CiU.

"Los políticos estamos para destapar la corrupción si existe, cuanto antes mejor, no estamos para tapar nada, todo lo contrario, estamos para destaparlo", agregó.

Aguirre se mantuvo al margen de la reforma del Estatuto de Cataluña porque la Comunidad de Madrid "no puede decir nada" en ese asunto pese a que su posición, coincidente con la dirección nacional del PP, pasa por preservar el consenso institucional de 1978.