Aguirre explicó que ese compromiso se materializará contando con los magníficos profesionales sanitarios de los centros públicos, utilizando al máximo los mamógrafos y dando la posibilidad a la mujeres que lo deseen de ir a un centro concertado.

Manifestó que siente una "hondísima preocupación" por esas 43.000 mujeres que están a la espera de que se les realice una mamografía, ya que el cáncer es la causa de mayor mortalidad de la mujer, y el de mama, el de mayor incidencia.

"Queremos resolver los problemas de los ciudadanos y, si para hacerlo tenemos que ir a centros concertados, lo haremos, dando a las mujeres que lo necesiten esa posibilidad, pero no obligamos a hacerlo", concluyó.

El portavoz de IU, Fernando Marín, que había preguntado a Aguirre por las "entidades con que piensa concertar para reducir la lista de espera de mamografía", aseveró que hay demoras de mas de un año y que, "si destinamos recursos a los centros concertados y no a resolver las carencias en los centros públicos, no vamos a resolver la situación sanitaria".