Aguirre, que mantuvo un encuentro en el Palacio de La Moncloa con el presidente del Gobierno, José María Aznar, defendió en rueda de prensala "estabilidad" que ha tenido España en los últimos 25 años gracias a las reglas de juego vigentes.

Manifestó que las últimas propuestas socialistas, como la reforma del Tribunal Supremo o la aprobación de un nuevo sistema de financiación autonómica, son "un torpedo en la línea de flotación de la Constitución española".

La presidenta madrileña arremetió especialmente contra la idea de José Luis Rodríguez Zapatero de convertir a los tribunales superiores de justicia de las comunidades en la máxim instancia en esta materia y apuntó que esa iniciativa "no está suficientemente meditada".

Según dijo, una reforma de ese tipo sólo preocupa a los líderes de los partidos independentistas y en ningún caso a los ciudadanos que elegirán al futuro presidente el próximo mes de marzo.

Asimismo, calificó de "chocante" que un partido de izquierdas como el PSOE pretenda acabar con el principio de solidaridad entre las distintas comunidades para que cada una de ellas recaude y reparta sus impuestos.

NUEAS INFRAESTRUCTURAS

Aguirre aprovechó su reunión con el presidente del Gobierno para solicitarle un mayor esfuerzo de la administración central en el desarrollo de las infraestructuras de la Comunidad de Madrid, especialmente de las radiales R-1 y R-6.

La presidenta pidió que el Ministerio de Fomento inicie el estudio de un plan de viabilidad y ejecución de lo que sería en un futuro la carretera de circunvalación M-60, a pesar de que todavía no está terminada gran parte de la M-50.

De hecho,aseguró que el compromiso del Estado pasa por completar algunos recorridos de la M-50 aprovechando la construcción de las radiales de la carretera de Burgos y la de A Coruña.

También explicó las ventajas que tendrá para los madrileños del sur la construcción de una estación en la Puerta del Sol y en la Plaza de Alonso Martínez con paso del tren de alta velocidad.

Según Aguirre, el presidente del Gobierno no adquirió, sin embargo, ningún compromiso y se limitó a escuchar las reivindicaciones de lamáxima dirigente de la Comunidad de Madrid.

Por su parte, el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de la Presidencia, Javier Arenas, explicó a continuación en rueda de prensa que la entrevista transcurrió con "normalidad" y sirvió para comprobar que tanto Aguirre como Aznar "coinciden" en el análisis de la situación política que atraviesa España.

Arenas criticó también las reformas anunciadas por el Partido Socialista e incluidas en el programa electoral de las generales, ya que las consdera "un ataque a la columna vertebral del Estado". Apuntó que algunas de las ideas de la formación de Rodríguez Zapatero son "para llevarse las manos a la cabeza".

El vicepresidente criticó las reformas estatutarias planteadas desde algunas comunidades, como País Vasco y Cataluña, pero defendió la de la popular Esperanza Aguirre porque se trata de una modificación "menor" que afecta exclusivamente al sistema electoral.