El país norteafricano prohibió estas redes en sus aguas en 1993, pero las demandas españolas consiguieron sucesivas prórrogas hasta septiembre de 1994. La prohibición afectaría a 30 pesqueros de Galicia y 17 de Andalucía.

Las conversaciones entre la Unión Europea y Marruecos, sbre el Acuerdo de Pesca para que la flota comunitaria pesque en aguas marroquíes, han concluido hoy finalmente sin acuerdo y con posturas divergentes por cada parte.

Marruecos exige una reducción del 50 por ciento de los barcos con licencia para pescar en sus aguas, alegando razones de conservación y gestión de los recursos. La medida afectaría principalmente a España, que cuenta con licencias para 650 pesqueros.

Por su parte, la UE considera que solamente una situación biológica negativa de los ecursos justificaría el cambio del acuerdo, y en su opinión esta no se ha producido. Marruecos se ha negado a la creación de un Comité Científico conjunto para analizar los caladeros.

Por ello, los negociadores comunitarios reiteraron que la postura marroquí vulnera el equilibrio del actual acuerdo y supone una renegociación y no una revisión a medio plazo, como estaba previsto en el texto firmado.