Según un comunicado de varias organizaciones ecologistas, entre ellas Greenpeace, Seo/Birdlife y WWF/Adena, en la última semana unas 500 aves vivas entraron impregnadas de petrólo en los centros de recuperación de fauna salvaje existentes en Galicia.

El pasado jueves por la tarde, responsables de la Administración gallega comunicaron el traslado de 60 de los 320 animals existentes en el Centro de Cotorredondo al de Oleiros y de otros 60 a la Facultad de Veterinaria de Lugo.

El resto, unos 200 animales, serían sacrificados, según denunciaron tanto la Asociación Profesional de Agentes Forestales como algunos voluntarios. Este hecho motivó un plante de ambos colectivos, que abandonaron el centro al conocer la decisión.

Fruto de la presión de los agentes, los voluntarios y grupos ecologistas, la Xunta parece haber dado marcha atrás en su decisión.

Sin embargo los ecologistas denuncian la falta de medios, el tratamiento inadecuado de las aves, que disminuirá las tasas de recuperación y la lenta respuesta en situaciones de emergencia, 500 días después de la catástrofe del "Prestige".