Medio centenar de agentes antidisturbios de la Guardia Civil dispersaron a primeras horas de esta tarde, a los 500 agentes de aduanas que desde las 8.45 de la mañana habían cortado la circulación en este punto fronterizo gerundense.

Las fuerzas del orden emplearon balas de goma y gases lacrimógenos para reprimir a los manifestantes.

Los agentes de aduanas, algunos de los cuales resultaron levemente herido, se fueron después a la zona del pabellón de deportes de la Junquera, donde anunciaron las acciones acordadas para mañana.

Uno de los miembros del comité de huelga de los aduaneros en huelga, Martí Farré, explicó que hoy hubiesen querido mantener su actitud hasta las 6 de la tarde, pero "la posición del Gobierno Civil de Gerona, que no quiso negociar este punto, impidió que se pudieramos mantener la protesta".

Farré dijo que habían hablado con el gobernador civil de la provincia, Pere Navarro, "unque la conversación no fue fructífera. Nos dio un plazo de tiempo hasta la 1 de este mediodía para que depusiéramos nuestra actitud, y dijo que si no salíamos de la autopista, la Guardia Civil cargaría contra nosotros".

A lo largo de esta mañana, los camiones acumulados a causa de la huelga de los agentes de aduanas colapsaron los aparcamientos y la zona de la autopista próxima a la frontera.

Por otra parte, los trabajadores en huelga de Port-Bou cortaron la vía férrea y, en Barcelona, hubo unamanifestación de medio millar de empleados de aduanas ante la Delegación del Gobierno, para pedir soluciones laborales.

Los concentrados protestaron por la falta de previsión laboral después de que se haga efectiva el acta única europea y la supresión de las fronteras comunitarias.