Martínez Millán indicó que las reservas de viajes para Semana Santa "van un poco mejor" que el año pasado, y que 1995 está siendo para este sector "ligeramente mejor" que 1994, pero señaló que "este tipo de cosas -en relación con los escándalos- están encojiendo el ánimo de la gente".

A su juicio, el país vive una "situación de infantilismo. A todos nos está perjudicando, no el hecho de que se clarifiquen situaciones y lajusticia al final prevalezca, sino que esos asuntos sean primera página todos los días de ciertos diarios y medios de comunicación".

Según Martínez Millán, "una parte importante de la gente que consume se queda acongojado pensando si el capitán Khan es o no es ó si el cadáver de hace 13 años está con uñas o sin uñas. Todo eso hace que la gente piense que no se puede ir de vacaciones esta Semana Santa por la incertidumbre y que crea que todo el panorama se vuelve negro".

Aseguró que, como consecuecia de estos acontecimientos, la gente se retrae en el consumo, "y el viaje es un consumo del cual se puede prescindir". Martínez Millán dijo que 1995, a pesar de estos asuntos, está siendo mejor que 1994, ya que "hay más dinero en el bolsillo y más ganas de gastarlo", pero "hemos tenido un mes de enero y febrero que podía haber sido más lucido".

"Me preocupa un poco que esa situación de tensión política acabe afectando a la Semana Santa, que para el turismo es una temporada alta de 7 días y un desahoo importante, y se vea frustrada por algún tipo de acontecimientos que a la gente yo creo que le afectan de forma exagerada", destacó.

PREVISIONES OPTIMISTAS

Pese a todo ello, Martínez Millán es optimista y cree que la Semana Santa de este año será mejor que la de 1994 y que se llenará toda la oferta de viajes que está en el mercado. También está convencido de que la facturación de las agencias de viajes en todo el ejercicio 1995 superará a la de 1994.

Según las estimaciones del presidente de l FEAV, las ventas de las agencias de viajes que viven del turismo emisor, es decir, de los turistas españoles, mejorarán un 4-5 por ciento en 1995, mientras que los ingresos totales por turismo, incluyendo el turismo receptivo, crecerán un 8-10 por ciento.

Martínez Millán estima que los ingresos por turismo alcanzarán este año los 2,100-2,150 billones de pesetas, frente a los 2,850 billones de 1994. El número de viajeros cree que aumentará a un ritmo inferior, del 2-3 por ciento, pero aseguró que "gasarán más dinero".

"1993 fue un año duro, de crisis, para las agencias emisoras, en el que la mayoría perdieron dinero; 1994 nos ha ayudado ya un poco a superar esa situación; estamos ante un 1995 que esperamos que sea de recuperación y estabilización, y pasemos a números positivos que permitan recuperar la rentabilidad de las empresas, y ya el 96 supongo que será un año francamente bueno ", concluyó.