Las tropas españolas están llegando en un goteo que comenzó el pasado 25 de enero, con la partida de los 43 prmeros efectivos, y culminará hacia el 15 de febrero, para cuando está previsto que hayan llegado los más de 400 hombres y mujeres asignados a esta misión.

Los que ya se encuentran en Afganistán son 80 militares del escalón avanzado de la tropa, compuesto por efectivos de todas las unidades que participan en la ISAF: logística, zapadores, ingenieros, transmisiones y desactivación de explosivos.

Bajo mando británico y siguiendo el mandato de la ONU, este contingente se ha ido instalando, con alguna dificultades, en varios lugares de Kabul para preparar la llegada del resto de sus compañeros, quienes, una vez instalados, se dedicarán a tareas de reconstrucción de infraestructuras y edificios, y apoyo al resto de la fuerza internacional.

Los 40 militares restantes que también están ya en la zona son los correspondientes a la Unidad Médica del Ejército del Aire, que ha instalado un hospital de campaña en la ciudad de Bagram, a unos 60 kilómetros de la capital. Este contingente no se encuentra enclvado en las fuerzas bajo mandato de la ONU, sino que lo está en el marco de la Operación Libertad Duradera, liderada por Estados Unidos, para luchar contra el terrorismo internacional.

La unidad médica, que viajó la semana pasada en un avión "Galaxy" prestado por el Ejército norteamericano, tiene capacidad para ofrecer asistencia médica a unos 400 pacientes y, en principio, atender a los soldados estadounidenses y británicos de la Operación Libertad Duradera, aunque también se podrán beneficiar los dela ISAF e incluso parte de la población civil afgana.