En un emotivoacto, en el que los 450 militares estuvieron acompañados de sus familiares, el Rey añadió que "a estos peligros se unen los problemas derivados de la gran distancia que separa España de Afaganistán" y "las complicaciones logísticas que ello trae consigo". Resaltó que "nunca desde hace más de un siglo tropas españolas habían sido destacadas tan lejos".

Don Juan Carlos, que estuvo acompañado por el ministro de Defensa, Federico Trillo, el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, y los jefes del Estado ayor de los Ejércitos, manifestó que "España está inequívocamente volcada en la lucha contra el terrorismo, que es la defensa de la libertad". Definió la misión que los militares españoles realizarán como "una parte importante de una acción concertada para luchar contra el terrorismo y para rescatar a un pueblo del horror del fanatismo".

También destacó la necesidad de "asumir con convicción nuestros compromisos y nuestras responsabilidades para con la comunidad internacional". Expresó su confianza enque "superaréis todas las dificultades" y recordó a "los más de 3.000 soldados desplegados fuera de nuestras fronteras en distintas misiones de mantenimiento de la paz, en tres teatros de operaciones y en siete misiones de observación auspiciadas por las Naciones Unidas, la Unión Europea y la Organización para la Seguridad y la Cooperación Europea", así como "el sacrificio de 22 de nuestros compañeros de armas".

Las unidades de logística, zapadores, ingenieros, transmisiones y helicópteros de las base de Zaragoza, Jaca (Huesca) y El Copero en Sevilla comenzarán a salir mañana de la base aragonesa con un primer contingente compuesto por 43 militares que saldrán destino a Kabul.