Así lo precisó este lunes Facua-Consumidores en Acción en un comunicado en el que recordó que la Federación Rusa anunció recientemente la implantación de restricciones para los vuelos de compañías aéreas de 36 países europeos, entre ellos España, como “respuesta” a la prohibición de los Estados europeos de vuelos de aeronaves civiles operadas por compañías aéreas rusas o registradas en Rusia, y que España es uno de los países que ha cerrado su espacio aéreo a las aerolíneas rusas.

En este punto, señaló que el artículo 8 del Reglamento Europeo 261/2004 recoge que, en caso de cancelación de vuelo, el transportista aéreo debe ofrecer a los pasajeros que tengan un vuelo con origen en un aeropuerto comunitario el reembolso en siete días del coste íntegro del billete en el precio al que se compró, correspondiente a la parte o partes del viaje no efectuadas y a la parte o partes del viaje efectuadas, "si el vuelo ya no tiene razón de ser en relación con el plan de viaje inicial del pasajero".

Este derecho también es aplicable en el que caso de vuelos con origen fuera de la UE y con destino a esta pero contratado con una aerolínea de la Unión y siempre que en el país de origen “no se tenga contemplado algún tipo de compensación”.

Además, recalcó que los afectados pueden elegir entre este reembolso del billete o la conducción hasta el destino final “en condiciones de transporte comparables", ya sea "lo más rápidamente posible, o en una fecha posterior que convenga al pasajero”. En paralelo, el artículo 9 de este reglamento establece que la aerolínea debe proporcionarles comida y refrescos “suficientes” en función del tiempo que tengan que esperar y dos llamadas telefónicas, télex o mensajes de fax, o correos electrónicos.

En caso de que el usuario opte por un transporte alternativo, cuando la salida prevista del nuevo vuelo sea como mínimo al día siguiente se le debe ofrecer alojamiento en un hotel y transporte entre el aeropuerto y el lugar de alojamiento y, de lo contrario, tiene derecho a reclamar a la aerolínea los gastos en que haya incurrido mientras esperaba el nuevo vuelo.

No obstante, la organización de consumidores aconsejó a los afectados que se decanten por el reembolso de los billetes en lugar del transporte alternativo teniendo en cuenta la situación, así como el tiempo de vigencia de las medidas restrictivas que están imponiendo los distintos Estados en relación al cierre de sus espacios aéreos.

Finalmente, en el caso de que las compañías les ofrezcan un bono alternativo al reembolso del billete, Facua explicó que, con independencia de la causa que haya motivado la cancelación del vuelo, “queda en manos del afectado decidir" si lo acepta o reclama la devolución del importe del billete y que la compañía “no puede imponer en ningún caso la aceptación de dicho bono”.