Esta situación, según Aedenat, es más grave en Madrid que en el resto de regiones españolas, porque la CAM alberga en su territorio 2.300 de los 20.000 centros sanitarios e industriales españoles en los que se utiliza este tipo de material.

La insuficiencia de medios con que cuenta el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) obligó a este organismo a firmar un acuerdo pilotocon el Gobierno de Cataluña, para que éste se hiciese cargo del control de las instalaciones radiactivas de la comunidad autónoma.

Los efectos positivos de ese convenio llevaron a la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados a instar al resto de comunidades autónomas a firmar acuerdos similares con el CSN. En la actualidad existen acuerdos con Valencia y Baleares y están pendientes de firma Navarra y Galicia.

Por ello, el 8 de marzo de 1988 la Asamblea de Madrid aprobó por unanimidad lapropuesta presentada por Izquierda Unida (IU), a iniciativa de Aedenat, para que el Gobierno de Joaquín Leguina suscribiese un contrato con el CSN.

Este organismo, asegura Aedenat, ha reiterado a la Agencia de Medio Ambiente dependiente del Gobierno de la CAM su disposición a firmar cuanto antes ese acuerdo, sin obtener respuesta tras cuatro años de "retraso injustificado".

"Los ecologistas", aseguraron fuentes de la asociación, "no entienden esta demora de casi cuatro años en un tema que sólo coportaría mejoras para la salud de profesionales y ciudadanos, al tiempo que evitaría posibles accidentes como el ocurrido en el Hospital Clínico de Zaragoza".