Con motivo de la presentación de un informe sobre estas bajas de larga duración que han elaborado Aecemco y la Fundación DFA, Rodríguez comentó que las denegaciones de incapacidad crean un problema en muchas ocasiones a los centros de empleo de iniciativa social porque se ven ante la tesitura de una recolocación inadecuada o de un despido.

Rodríguez pidió al INSS que sea más transigente en la consideración de la situación de estos trabajadores y que facilite alternativas, por ejemplo, de ayuda a la reducción de jornada en casos en los que no sea posible la incapacidad. Aecemco recordó que los juzgados de lo social dan muchas veces la razón a los trabajadores que recurren la denegación de incapacidad permanente.

En el mismo acto, organizado por Servimedia, el responsable de Aecemco también solicitó al Ejecutivo un mejor trato para los centros especiales de empleo de iniciativa social. A su juicio, se está queriendo vender las “bondades” de los centros de empleo "lucrativos", “pero la realidad es que el objetivo de estas empresas es conseguir beneficios y son empresarios que invierten para ganar dinero”, mientras “nosotros invertimos para que las personas con discapacidad tengan el mejor trabajo posible”.

“Esto se ha desmadrado totalmente” y se está “desnaturalizando” el concepto de centro especial de empleo", según Rodríguez. A su juicio, quieren convertirlos "en gestión de mano de obra barata”. En ese contexto enmarcó la supresión anunciada semanas atrás de las bonificaciones a los centros especiales de empleo, algo a lo que finalmente renunció el Gobierno.

El presidente de Aecemco dijo que confía en que el gabinete de Pedro Sánchez “reflexione” sobre la capacidad de generación de trabajo estable para personas con discapacidad de los centros especiales de empleo de iniciativa social en comparación con la empresa ordinaria y lo tenga en cuenta a la hora de otorgarle ayudas. “Tenemos que seguir creciendo”, añadió, porque “somos emprendimiento colectivo”.