López Collado, qu acudió al lugar escoltado por varios coches de la Policía Municipal y acompañado de un reducido grupo de periodistas, se apeó del vehículo y recorrió a pie varias calles del poblado de La Celsa, ante la mirada dura e impávida de sus moradores, a los que apenas llamó la atención la presencia de los recién llegados.

El concejal penetró en el interior de una chabola en donde se realiza habitualmente la venta de drogas y pudo comprobar cómo varias decenas de jóvenes que se estaban "pinchando" huían al deectar la llegada de los visitantes.

El nuevo responsable de la Policía Municipal apenas podía dar crédito a sus ojos. "Nunca he estado dentro de La Celsa, pero he de confesar que el espectáculo es tremendo. Hay auténticas expendedurías de droga y parece evidente que hay una cobertura social de esta actividad", declaró a los periodistas.

Sin embargo, lo que más le llamó la atención fue ver que junto a los grupos de "yonquis" había numerosos niños, muchos de los cuales no tenían más allá de 12 años y algunos incluso se estaban inyectando. "Este hecho es gravísimo", añadió, "y desde luego es algo contra lo que tenemos que luchar".

CONOCER LAS "ZONAS CALIENTES"

La visita del concejal al barrio de La Celsa responde a su deseo de conocer sobre el terreno las zonas conflictivas de la capital, para poner en práctica medidas que puedan garantizar la seguridad de los ciudadanos.

Las barriadas de La Celsa y Torregrosa, situadas al sur de la ciudad, en las inmediaciones de Mercamadrid, forman part del itinerario de la línea 130 de la EMT (Vicálvaro-Villaverde Alto), una de las más conflictivas de la empresa, ya que son utilizadas por numerosos toxicómanos que acuden diariamente a estos dos "supermercados" de la droga.

El concejal de Seguridad señaló que el Ayuntamiento, el Consorcio de Transportes y la dirección de la EMT encontrarán solución al problema de la inseguridad en la línea, "porque es un problema", precisó, "de circulación y de utilización de un servicio público".

Aunque no quio adelantar las medidas que su concejalía pondrá en marcha, López Collado anunció que en próximas reuniones que mantendrá con los responsables del Consorcio y con la Junta Local de Seguridad se analizará el problema y se adoptarán las correspondientes actuaciones.

El edil reconoció que en La Celsa hay familias que no se dedican al tráfico de drogas y que están sufriendo las consecuencias.

GOLPEAR EN TODOS LOS ESLABONES

"La Policía Municipal golpeará en todos los eslabones de la cadena del tráfio de drogas. No aceptamos prejuicios ideológicos en el sentido de que se ataca al pequeño camello y no a la cabeza del narcotráfico, porque la cosa no es tan sencilla. El problema del pequeño 'camello' es el del proselitismo, buscar nuevos clientes, por lo que nos parecen unos delincuentes muy peligrosos", concluyó.

Desde La Celsa, el concejal y el director de la Policía Municipal se trasladaron a la colonia de Torregrosa, situada junto al Manzanares, en una zona próxima a la depuradora de La China. López Collado asistió de nuevo al mismo espectáculo: jóvenes que huían con las jeringuillas clavadas en el brazo cuando se percataban de la presencia de los "intrusos" y niños semidesnudos que contemplaban absortos la llegada de los visitantes.

Al final de su periplo, el concejal repitió el mismo mensaje: "Luchar contra cualquier eslabón de la infernal cadena del tráfico de drogas es bueno, no sólo son buenos los grandes alijos, sino que también lo es atacar a los intermediarios pequeños y medianos sobre todo al proselitismo del consumidor, especialmente cuando incide sobre la juventud", subrayó López Collado.