Según explica el administrador ferroviario en un comunicado, la limpieza de márgenes de las vías se llevará a cabo mediante tres trenes herbicidas, más un cuarto a libre disposición del ADIF si es requerido. La operación abarcará la totalidad de la red de ancho convencional, incluyendo vías generales, vías de explanación y explanadas ferroviarias.

Los riegos con productos herbicidas se realizarán en el conjunto de la red dos veces al año, coincidiendo con las temporadas de primavera y otoño. La novedad respecto a años anteriores es que hasta ahora la segunda campaña no abarcaba toda la red, sino sólo aquellos puntos que presentaban un mayor riesgo.

Otra de las novedades de este contrato es que cada uno de los trenes estará apoyado por un vehículo auxiliar que se desplazará por carretera y que permitirá llegar a algunas zonas que no pueden ser alcanzadas desde los propios trenes herbicidas.

Este contrato forma parte de una serie de acciones que la entidad pública lleva a cabo de forma permanente con el fin de reducir riesgos y minimizar las consecuencias de los incendios que accidentalmente puedan producirse en las inmediaciones de las líneas férreas.

El mantenimiento de la caja de la vía y su entorno libre de vegetación también se lleva a cabo en las líneas de alta velocidad a través de otros contratos. De esta forma el ferrocarril se convierte también en una especie de barrera artificial o cortafuegos.