"Desearíamos", dice Adena/WWF a Borrell, "que sea usted recordado como el ministro que salvó a El Pardo, en lugar de como el ministro que permitió la destrucción de un sector de este tesoro nacional".

La organización conservacionista, tras reconocer "lo extremadamente complicado que resulta solucionar los complejos problemas de una gran urbe como nuestra capital", advierte al Gobierno que "si este tipo de dificultades e enfocan desde una óptica ultrasectorial", en lugar de una consideración de conjunto, se complicaría todavía más la situación.

"Sus técnicos, señor ministro, pueden hacer y deshacer carreteras y otras obras públicas... y sólo costará más dinero a nuestro país. Pero ni todos sus técnicos juntos (...) serían capaces de recuperar un ecosistema destruido", asegura Adena/WWF.

La organización concluye que "tales desatinos constituyen un abuso de poder", puesto que cualquier ciudadano "que recibiera un información científica y objetiva estaría dispuesto a emplear algo más de dinero y tiempo para encontrar una solución técnica idónea que evite el deterioro de esta joya de nuestra naturaleza".