Adena y Martínez de Pisón Premios Nacionales de Medio Ambiente --------------------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, aseguró hoy que la solución a los problemas medioambientales pasa por hacer pagar a las emprsas contaminantes "los cánones de vertidos cuando no tengan los equipamientos que les permitan depurar, por ejemplo, el agua que vierten".

Borrell realizó estas declaraciones a un grupo de periodistas tras el acto de entrega de los Premios Nacionales de Medio Ambiente 1991, que él mismo presidió hoy en el salón de actos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

La Asociación de Defensa de la Naturaleza (Adena) obtuvo el galardón en el apartado de entidades no administrativas, retribuid con dos millones de pesetas, por la labor que ha realizado en defensa de los parques nacionales y de las especies en peligro de extinción.

En el apartado de personas físicas, el premio (dos millones de pesetas) lo obtuvo el catedrático de Geografía de la Universidad Autónoma de Madrid, Eduardo Martínez de Pisón, que ha participado en diversas expediciones al Himalaya y Los Alpes y es el autor de varios trabajos sobre el continente Antártico.

El naturalista español Joaquín Araujo, que hoy recibiren Estocolmo de manos de el rey Gustavo de Suecia el premio "Global 500" que otorga el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), fue galardonado con una Mención Especial.

También recibió una Mención Especial la Mesa para la Descontaminación de Huelva, por sus trabajos en el Polo Químico onubense, y el Módulo de Promoción y Desarrollo de la Escuela Taller de Llanes consiguió una Mención Honorífica, por sus proyectos conservacionistas y de recuperación de esa comarca ovetense.

Pisón hizo un llamamiento al incremento de la conciencia medioambiental entre la población y, asimismo, a la necesidad de conservar los sistemas montañosos por ser "el último reducto" natural del país.

Por su parte, José Borrell resaltó el intento de la Comunidad Europea de establecer un impuesto verde sobre el consumo de energía para, así, "potenciar el transporte colectivo".

El ministro pidió solidaridad con las poblaciones venideras para que "puedan mantener la calidad de vida de la que disfutamos nosotros".

Borrell reconoció que el medio ambiente ha adquirido durante los últimos años una gran importancia política ante el aumento de la sensibilidad ecologista que ha experimentado la sociedad, aunque añadió que existen límites físicos que impiden que todas las partes del mundo disfruten de los mismos bienes y calidad de vida.

ESCASA CULTURA

Borrell señaló, no obstante, que en España hay "una escasa cultura sobre lo que es la propiedad colectiva" y aseguró que su departamento intentrá concienciar a la población sobre estos problemas.

El titular de Obras Públicas y Transportes ratificó que un billón y medio de pesetas es el presupuesto aproximado que requerirá la realización de un programa de saneamiento de las aguas fluviales, pantanos y mares españoles.

Según el secretario de Estado para las políticas del Agua y el Medio Ambiente, Vicente Albero, esta es una de las "acciones estrellas" que su departamento va a empreder durante los próximos meses.

Para Albero, el objetvo es "conseguir en un plazo, lo más breve posible, que nuestros cauces, nuestras cuencas y costas marítimas se encuentren en condiciones medioambientales correctas".

Finalmente, declaró que intentarán evitar la proliferación de vertederos incontrolados y ampliarán la red de control atmosférico, que dejará de depender de la Secretaria General de Consumo para formar parte de la de Medio Ambiente.

(SERVIMEDIA)
05 Jun 1991
GJA