ACUSADA DE OCHO ROBOS POR EL PROCEDIMIENTO DEL "BESO DEL SUEÑO"

MADRID
SERVIMEDIA

María Dolores M.S., de 28 años, fue detenida ayer como presunta autora de ocho robos por el procedimiento conocido como "beso del sueño", en los que consiguió un total de 10millones de pesetas, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía.

La presunta delincuente dormía a sus víctimas con un narcótico que introducía en las bebidas y una vez dormidos, les robaba todo lo que tenían, procedimiento conocido como "beso del sueño".

El pasado mes de agosto, un vecino de Getafe denunció en la comisaría haber sido desvalijado por una mujer a la que había conocido en una discoteca del centro de Madrid. Ambos fueron a un motel de la carretera de Andalucía y lo último que rcuerda fue que estaba tomando una copa junto a ella.

Cuando despertó, la mujer había desaparecido y se había llevado todo su dinero y demás objetos de valor, que tasó en un millón de pesetas aproximadamente.

El Grupo de Delincuencia Urbana inició una investigación que, por las características del robo, los datos físicos y el paralelismo con otros casos, condujeron a la identificación de María Dolores M.S. como posible responsable.

La mujer, detenida en un piso de alquiler del paseo de las Deicias, fue arrestada en septiembre de 1989 por delitos de la misma clase y tenía pendientes 10 reclamaciones judiciales.

Los funcionarios de la Jefatura de Policía recuperaron del domicilio diversos objetos de valor, como bolígrafos y pitilleras, así como papeletas de empeños y muchos comprimidos sedantes de diferentes clases, suspuestamente para sus víctimas.

La Policía lleva esclarecidos hasta la fecha siete hechos del mismo tipo, dos de los cuales corresponden al mes de agosto y los restantes l año 1992, ya que, debido a su embarazo, María Dolores M. suspendió durante tiempo su actividad ilícita.

LES DORMIA, CUIDABA Y ROBABA

María Dolores M.S., vestida siempre a la última moda, captaba a los clientes en las discotecas de la capital y luego los llevaba a algún apartamento de la víctima o a un hotel para ejecutar su robo.

Una vez allí, vertía un somnífero en una copa o incluso lo pasaba de boca a boca, lo que provocaba un profundo sueño de varias horas a sus compañeros. Un vecino de Aarcón permaneció varios días en coma.

La mujer utilizaba para enganchar a sus víctimas su supuesta afición al billar y más adelante se interesaba por el estado de salud de su intelocutor por si padecía alguna enfermedad cardíaca.

Según la supuesta ladrona, cuando ya estaban dormidos les llegaba a tomar la tensión con un aparato que portaba consigo, para conocer la evolución de su estado.

María Dolores M.S. asegura que en una ocasión avisó a los servicios médicos de urgencia al darse cuenta dl peligro que corría un hombre al que había dormido.

(SERVIMEDIA)
06 Sep 1993
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